

El Café Royalty es el único gran café romántico histórico conservado en Andalucía y posiblemente en toda España. Sus ricas pinturas de artistas de renombre como Felipe Abarzuza, su exquisita carpintería artesanal y escayolas originales recubiertas de pan de oro fino, junto al mobiliario de las primeras décadas del siglo XX, no deja indiferente al visitante.
Se exhibe orgulloso en el mismo solar que ocupó la huerta de un antiguo convento y después vivió Goya, hoy una encantadora plaza del Cádiz mas antiguo: la Plaza Candelaria, antigua Plaza Emilio Castelar. Emblemático y elegante espacio muy visitado en la época por la alta burguesía gaditana.
El empresario gaditano Gómez Doreé abre por primera vez sus puertas en 1912, festejando el centenario de Las Cortes de Cádiz de 1812. Gracias a su suntuosa decoración, exquisitos productos, servicio esmerado y conciertos todas las noches, se convierte rápidamente en el café más visitado de la ciudad.
Literatos, intelectuales, políticos, toreros, músicos y artistas hacen del café un espacio con un ambiente variopinto y único. A él acuden figuras internacionales tan ilustres como el gran compositor gaditano Manuel de Falla, quien deleitó al público con sus conciertos.
En los años treinta, en vísperas de la Guerra Civil Española, Café Royalty decide cerrar sus puertas. Ya en la postguerra de los años cuarenta, se convierte en almacén y poco después en bazar, comenzando su decadencia y quedando en el olvido durante las siguientes sietes décadas.
En el año 2008, mis padres: Ricardo de la Serna Viguera y Ana Dolores Martín Fernández compran el establecimiento y deciden restaurarlo minuciosamente, para devolverle así el esplendor de antaño y recuperar la marca Café Royalty.
Después de una meticulosa investigación, reunimos a un grupo de artistas y restauradores que emplean las mismas técnicas y materiales que se usaban a principios del siglo XX. Llevamos a cabo un largo proceso de restauración, siendo siempre fieles a la Historia y cuidando hasta el último detalle la decoración original de 1912.
El Café Royalty, en el año 2012 y en pleno Bicentenario de las Cortes de Cádiz, reabre sus puertas a todos los gaditanos y visitantes de la ciudad, con la intención de volver a ser un símbolo de calidad y armonía para sus clientes y un orgullo para la ciudad, tal y como lo fue cien años atrás.
Last friday, it opened its doors after seventy years casted into oblivion. Cafe Royalty is the only historically preserved grand romantic cafe in Andalussia and probably in all of Spain. Its rich paintings by well known Spanish artists such as Felipe Abarzuza, beautifully handcrafted carpentry from the era, and gold leaf plaster details, together with early 20th century furnishings, will no doubt capture the attention of all its patrons.
It is proudly situated in the old quarter of Cadiz, at the same space that an old convent used to be and later on Goya lived in. Today, the enchanting Plaza Candelaria, previously the Emilio Castelar Plaza : an emblematic and elegant spot that was in its day very popular with the city’s high society.
Local entrepreneur Gomez Doree, inaugurates the Cafe in 1912
in celebration of Las Cortes de Cadiz one hundred year anniversary. Thanks
to its lavish decor, exquisite products, excellent service and nightly
concerts, it rapidly becomes the most frequented cafe in town. Renowned
writers, intellectuals, politicians, bullfighters, musicians and artists turn the cafe into a
spot brimming with a unique and diverse atmosphere. It is visited by
illustrious international figures such as the great local composer, Manuel de
Falla, who often delighted customers with his concerts.
In the 1930's, just prior to the Spanish Civil War, Cafe Royalty
decides to close its doors. Then, in the postwar 1940's, it becomes a
warehouse and shortly thereafter a bazaar. This was the start of its
decline and impending fall into oblivion for the next seven decades.
In 2008, my parents: Ricardo de la Serna Viguera and Ana Dolores
Martin Fernandez, purchase the establishment and decide to meticulously
restore it back to its splendor, recovering the Cafe Royalty brand. After a
thorough investigation, my family brings together a
group of artists and professional restorers, who apply the same techniques
and materials used in the turn of the 20th century. They carry out a long
process of restoration staying true to the cafe's history, with the utmost
care and detail of the original decoration from 1912.
In 2012, in midst of Las Cortes de Cádiz two hundred year
anniversary, The Cafe Royalty reopens its doors to the city's locals and
visitors, with the intention of renewing a symbol of harmonious quality, just
as it was a century ago.